Ajo Medicina Natural por excelencia
Uno de los remedios
curativos más eficaz es el Ajo, combate infecciones, es un potente
antiinflamatorio, aumenta las defensas, mejora la circulación, previene la
arteriosclerosis, disminuye el exceso de grasas en la sangre, previene la
hipertensión, alivia el dolor, es un eficaz expectorantes, está indicado en
problemas del aparato respiratorio, es diurético y estimulante.
Desde la antigüedad se
le ha reconocido al Ajo amplias propiedades terapéuticas, el pueblo Egipcios,
Hebreos, Sumarios, Griegos y Romanos,
lo consideraban primordial para alimentar y sanar el cuerpo; el ajo es una
planta aromática comestible y medicinal, que cura y previene múltiples
enfermedades.
Científicamente
comprobado que el ajo tiene vitamina A, B1, B2, B3, C, E; además contiene agua,
carbohidratos, proteínas, fibra, potasio, fósforo, calcio, hierro, y sodio; el
ajo es una de las plantas más ricas en selenio y germanio orgánicos. También
contiene adenosina, una sustancia química común en el ajo, cebollas y los
puerros, cuya principal es bloquear la agregación de plaquetas y fluidificar la
sangre.
Investigaciones
realizadas en las últimas décadas han demostrado que el ajo inhibe el
crecimiento de los estafilococos, los estreptococos y las bacterias causantes
de disentería y del tifus. También está demostrada su efectividad para combatir
microorganismos resistentes a ciertos antibióticos, “destruye las
bacterias patógenas en los intestinos
sin dañar la flora bacteriana. Es un desinfectante 50 veces más potente que el
alcohol de 90g o el zumo de limón, además de ser un excelente antiinflamatorio.
El ajo es útil para las
infecciones de la boca, garganta, gripe, resfriados, tos, bronquitis,
sinusitis, laringitis, rinitis, asma; expectorante por excelencia, infecciones
del estomago, infecciones de la piel.
El ajo ayuda a combatir el ácido
úrico, actúa como un protector en la calcificación de las arterias. Previene la
hipertensión y regula la circulación de
la sangre. Es estimulante, diurético y expectorante. Elimina los residuos que
van quedando en el organismo, sus enzimas favorecen los ácidos grasos, ayudando
a bajar el colesterol. Por su alto
contenido en fósforo y azufre, se destaca como un sedante para los nervios.
¿Cómo consumir el Ajo?, es aconsejable comerlo crudo ya que cocido
pierde más del 90% de sus propiedades curativas. Jamás deberás cocinarlo,
porque perderá las propiedades medicinales que contiene, puede consumirlo crudo
en ensaladas, juntos cebolla, brócoli, tomate, repollo y lechuga, y así mitigar
un poco su olor.
Yo consumo ajo, lo parto
en pedacito y me lo tomo como si fuera una pastilla.
El ajo es un alimento terapéutico inocuo y
tras su ingesta nunca se han observado efectos negativos para la salud, sino
mas bien innumerables beneficios. Los profesionales
de la salud recomiendan tomas uno o dos dientes de ajo cada día porque se le
considera capaz de prevenir gran número de dolencias, y tiene efecto
preventivo, incluso de cáncer.
“El ajo es sinónimo de salud, cómelo”….
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